viernes, 22 de noviembre de 2013

Un modelo de desarrollo positivo adolescente basado en la competencia






En los últimos años ha surgido un nuevo modelo centrado en el desarrollo positivo y en la competencia durante la adolescencia. De acuerdo con este enfoque, una adolescencia saludable y ajustada y una adecuada transición a la adultez requieren de algo más que la evitación de algunos comportamientos como la violencia, el consumo de drogas o las prácticas sexuales de riesgo.

Este modelo adopta una perspectiva centrada en el bienestar, pone un énfasis especial en la existencia de condiciones saludables y expande el concepto de salud para incluir las habilidades, conductas y competencias necesarias para tener éxito en la vida social, académica y profesional.

El objetivo es construir un modelo de desarrollo positivo adolescente, es decir, un modelo de las competencias y características individuales que pueden considerarse más importantes de cara a definir a un chico o chica competente y con un buen ajuste.
Este enfoque emplea un nuevo vocabulario, con conceptos como desarrollo adolescente positivo, bienestar psicológico, participación cívica, florecimiento, iniciativa personal o recursos o activos para el desarrollo. Estos conceptos comparten la idea de que toda persona durante su adolescencia tiene el potencial para un desarrollo exitoso y saludable.


Características del modelo del desarrollo positivo adolescente.

Este enfoque considera a jóvenes y adolescentes como recursos a desarrollar más que como problemas a solucionar.

Enfatiza las potencialidades más que las supuestas carencias de los y las adolescentes, incluso de los más desfavorecidos y vulnerables.

Parte de una visión de los jóvenes como personas deseosas de explorar el mundo, que van ganando en competencias y que adquieren la capacidad para hacer su contribución al mundo en el que viven.

Persigue el objetivo de comprender, educar e implicar a la juventud en actividades productivas y significativas, en lugar de ocuparse de corregir, curar o tratar sus conductas problema.

Considera que la ausencia de problemas no garantiza un desarrollo saludable y una preparación para la adultez.

El desarrollo de las competencias personales es un factor de protección que hace a chicos y chicas más resistentes y previene el surgimiento de problemas de ajuste psicológico y comportamental



El modelo de desarrollo positivo de las 5 Ces

Una de las primeras tareas a resolver a la hora de construir un modelo de desarrollo adolescente positivo es definir las competencias que constituyen dicho desarrollo, y que, por lo tanto, pueden constituir objetivos a alcanzar por todo programa que pretenda la promoción del desarrollo adolescente. Quizá el modelo más completo sea el denominado modelo de las 5 ces. Propuesto inicialmente por Little (1993), incluía 4 factores latentes que agrupaban diversas competencias y características psicológicas o conductuales. Algunos autores (Roth y Brooks-Gunn, 2003; Lerner, 2004) añadieron a esta propuesta inicial un quinto factor, con lo que quedó configurado un modelo que captura la esencia de los indicadores de competencias cognitivas, conductuales y sociales que componen el desarrollo adolescente positivo.

Los factores son:

Competencia.

Referida a la capacidad para mostrar un buen desempeño en distintas áreas de actividad (social, académica, cognitiva y vocacional). Incluye habilidades sociales como la asertividad, habilidades de resolución de conflictos, competencias cognitivas como la capacidad para tomar decisiones, y académicas.

Confianza.

Es un sentido interno de valoración global positiva de uno mismo y de autoeficacia: autoestima, identidad y autoeficacia.

Conexión.

Se refiere a los vínculos positivos con personas (familia, iguales, adultos) e instituciones que se reflejan en intercambios bidireccionales

Carácter.

Es el respeto por las normas sociales y culturales, la adquisición de modelos de conducta adecuada, el sentido de lo correcto o incorrecto (moralidad) e integridad.También incluye el autocontrol y la ausencia de problemas externos o conductuales.

Cuidado y compasión.

Un sentido de simpatía y empatía e identificación con los demás.

Si todas las 5 ces están presentes surge en el chico y la chica adolescente una sexta C: contribución, a sí mismo, a la familia, a la comunidad y a la sociedad civil. Esta contribución tiene un componente conductual y un componente ideológico. Y aunque el curso evolutivo de estos dos componentes está por determinar, es de esperar que en un principio estén diferenciados para ir integrándose a lo largo de la vida.

En este modelo, que considera que chicos y chicas adolescentes tienen mucha plasticidad y grandes potencialidades, el florecimiento representa el proceso por el que, implicado en relaciones saludables con su contexto, el adolescente se encamina hacia el desarrollo de una integridad personal ideal. Cuando la persona florece contribuye de forma positiva a la sociedad en la que vive. Por lo tanto, una flor que integra las cinco áreas o competencias que definen un desarrollo positivo, y que tiene la capacidad de crecer, representa una buena metáfora gráfica del modelo.







El modelo del desarrollo positivo representa una visión optimista del ser humano, en general, y del adolescente, en particular, en el que cuando se dan las condiciones favorables, y chicas y chicas se ven implicados en relaciones saludables con su contexto, florecen como ciudadanos prosociales y responsables que realizan su contribución personal a la sociedad en la que están inmersos.

Por lo tanto, cuando se crean esas condiciones contextuales, no solo se estará favoreciendo el desarrollo saludable de jóvenes y adolescentes, sino que, además, estaremos contribuyendo a la mejora de la sociedad.
Os recomiendo que consultéis la bibliografía que aparece a continuación. Hay un enlace del Departamento de Educación del Gobierno de Navarra que añade el proyecto de la Junta de Andalucía sobre recursos y estrategias de intervención para desarrollar este modelo. También, otro enlace con el estudio sobre el modelo de desarrollo positivo realizado por profesionales de la Universidad de Sevilla y Huelva a partir de investigaciones surgidas en Estados Unidos en los últimos años.




Fuentes de información:
Oliva, A., Hernando, A., Parra, A., Pertegal, M. A., Ríos, M. y Antolín, L. (2008). La promoción del desarrollo adolescente: Recursos y estrategias de intervención. Sevilla: Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.

Más allá del déficit: construyendo un modelo de desarrollo positivo adolescente.
ALFREDO OLIVA, MOISÉS RÍOS, LUCÍA ANTOLÍN, ÁGUEDA PARRA, ÁNGEL HERNANDO Y MIGUELNGEL PERTEGAL.
Universidad de Sevilla; Universidad de Huelva.
http://personal.us.es/oliva/10.%20OLIVA.pdf


Aránzazu Ibáñez



La motivación y la fuerza de voluntad en la adolescencia

 

¿Cómo mantener la motivación y seguir avanzando hacia la consecución
de un objetivo?

Todo es cuestión de
planificar bien las cosas,
tener expectativas realistas y
ser perseverante.



He aquí lo que necesitas hacer:


Fíjate un objetivo. Empieza anotando lo que quieres conseguir: tu meta principal, lo que deseas que se haga realidad.

Está bien soñar a lo grande -es la forma en que mucha gente consigue lo que desea. Lo único que debes recordar es que, cuanto más ambiciosa sea la meta que te fijes, más tendrás que esforzarte para alcanzarla.

El objetivo que te plantees debe ser específico y realista. La gente a menudo abandona sus objetivos porque sus expectativas son poco razonables. Parte de la capacidad de mantener la motivación depende de ser realista sobre lo que uno puede conseguir dentro del período de tiempo que se ha fijado.

Escríbelo. Pon tu objetivo específico por escrito. Luego vuélvelo a escribir. Una y otra vez. Las investigaciones muestran que escribir un objetivo forma parte del proceso mental de comprometerse a cumplirlo. Escribe tu objetivo cada día para no pederlo de vista y para recordarte a ti mismo lo mucho que deseas alcanzarlo.

Fragméntalo en objetivos parciales. Todo cambio requiere autodisciplina. Necesitas dedicar una atención constante para no apartarte de tu propósito. Una forma de allanar el camino es dividir el objetivo en pequeños pasos. El hecho de ir alcanzando frecuentemente pequeños objetivos es algo digno de celebrar. Te transmitirá confianza, seguridad en ti mismo, ánimos y motivación para seguir haciendo lo que te hayas propuesto hacer. De modo que recompénsate por cada objetivo parcial que vayas alcanzando.
Anota también los objetivos parciales para poder hacer un seguimiento de lo que necesitas hacer, registrar los logros parciales a medida que los vayas cumpliendo y disfrutar sabiendo que te vas acercando a la gran meta. (El hecho de escribir los pasos específicos tiene otra ventaja -si notas que te flaquea la voluntad, puedes echar un vistazo a tu lista para comprobar el camino que ya llevas andado, animarte y reorientarte).

Comprueba tus progresos. Ahora que has dividido tu objetivo en una serie de objetivos parciales, comprueba tus progresos cada día. Cuando cumplas un objetivo parcial, márcalo en tu lista. ¡Ya estoy a mitad de camino para lograr mi objetivo! Recompénsate con algo que te prometiste cuando te fijaste el objetivo. ¡Saborea el éxito! Y luego piensa en cómo vas a lograr el resto de tu objetivo.

Si tienes un resbalón o te falla la voluntad, vuélvete a comprometer con tu objetivo. Si tienes un resbalón, no tires la toalla. Perdónate a ti mismo y organiza un plan para volver a retomar el camino que te llevará a tu objetivo. Date unas palmaditas en la espalda por el camino que ya llevas andado. No te machaques ni seas demasiado duro contigo, independientemente de lo que te hayas desviado del camino que te habías trazado. La mayoría de la gente tiene algún resbalón cuando intenta introducir algún cambio en su vida -es una parte natural del proceso.

El hecho de escribir las tareas diarias y los objetivos parciales también ayuda en este punto, porque, si llevas un registro de tus progresos, enseguida te darás cuenta cuando tengas un resbalón, lo que te hará más fácil retomar el camino hacia tu objetivo. Y sabrás exactamente cuándo te has salido del camino. ¿Y si tienes un resbalón tras otro? Pregúntate a tu mismo si estás realmente comprometido con tu objetivo. Si la respuesta es afirmativa, vuélvete a comprometer -y ponlo por escrito. El proceso de escribirlo todo también te puede ayudar a descubrir si estás o no realmente comprometido con un objetivo.

Tómate los traspiés y resbalones como lecciones o recordatorios de por qué estás intentando hacer un cambio. Si te sales del plan trazado, no lo interpretes como un fracaso sino como una oportunidad para aprender algo nuevo sobre ti mismo. Supongamos que tu meta es no pelearte tanto con tu hermano o hermana. Tal vez aprendas que es mejor decir: "Ahora no puedo hablar sobre eso" y tomarte tu tiempo para tranquilizarte cuando notes que estás empezando a perder los estribos.

Mantén una actitud positiva. Imagínate o sueña cumpliendo tu objetivo. La imaginación ayuda a no perder de vista lo que uno está intentando lograr. Ayuda mucho creer que es posible. Y también podrás recuperar tu imagen mental cuando te flaquee la voluntad o sientas que te falta motivación.

El pensamiento positivo y el lenguaje interno también son buenos aliados de la motivación, al favorecer la adopción de una actitud positiva.

Búscate un compañero. Otro gran estímulo es encontrar gente que te apoye y anime. Búscate un compañero que se haya propuesto un objetivo similar al tuyo para que os podáis apoyar mutuamente. Poder contar con alguien que comparte tu objetivo puede marcar la diferencia cuando te falle la voluntad. Si no estás obteniendo el apoyo y los ánimos que necesitas de la gente que te rodea, tal vez necesites tomarte un respiro de una amistad en concreto y rodearte de personas que quieran ayudarte a alcanzar tu objetivo. Por ejemplo, si vas cada jueves a casa de un compañero para estudiar juntos al salir de clase, pero últimamente a tu amigo le ha dado por poner la televisión, participar en chats de Internet o colgarse del teléfono ignorando tus ruegos de que es hora de estudiar, ha llegado el momento de cambiar de compañero de estudios. No podrás centrarte en tu objetivo si tu amigo no comparte ese objetivo -o, todavía peor, intenta alejarte de él. Busca otra persona que comparta tus objetivos y que se haya marcado un camino similar.

¡No tires la toalla!

Poner fin a un comportamiento insano o aprender a hacer algo nuevo y emocionante, a fin de cuentas, no es más que asumir la responsabilidad de nuestras vidas. Encontrar la motivación para hacerlo no es necesariamente fácil pero siempre es posible. Puedes mantener la motivación anotando tus objetivos, perseverando en el plan que te traces y recordándote a ti mismo qué te llevó en un principio a fijarte ese objetivo. Los cambios son emocionantes. ¡Si no, la vida sería muy aburrida! ¡Buena suerte en la consecución de tus objetivos!


Por: Aránzazu Ibáñez


Pasos para mejorar el rendimiento académico



  • Para rendir al máximo debes primero haber retenido al máximo las explicaciones de clase tomando buenos apuntes, tener estos y todos tus materiales de estudio ordenados y al día.

  • Dedica un tiempo al estudio todos los días. Hora y media diaria en la ESO y tres horas en Bachillerato, aunque no se tengan deberes. Siempre se puede repasar la lección.

  • Ponte una hora fija en la que encuentres un buen ambiente de estudio. Parte de horarios de estudio ya planificados. No a las dilaciones. Las dilaciones se disfrazan de mil maneras:
                          "Un día más no importa, empezaré mañana"
               "No importa si empiezo unos minutos tarde, nadie es puntual"

  • Ten una habitación fija para trabajar. Sin teléfono, sin televisión, sin ordenador, sin radio, bien sentados con mesa apropiada, no se estudia en la cama, ni recostados en el sofá,... Debes estudiar en un sitio adecuado que te permita la concentración.

  • Tienes que tener una elevada motivación que te haga rendir al máximo cada minuto.

  • Ordena las tareas. El orden exterior, tener la mesa de estudio limpia y despejada, ayuda al orden interior, a la hora de memorizar, comprender. En el estudio-trabajo conviene empezar por la materia de mediana dificultad, se pasa a mayor dificultad y por último la de menor esfuerzo. Dedica mayor cantidad de horas a las asignaturas que sean más complejas y difíciles, aunque no sean tus preferidas

  • Es muy importante intercalar breves periodos de descanso cada hora de estudios (cinco minutos). Algún movimiento físico moderado puede ser muy recomendable.

  •  Diseña un plan con lo quieres alcanzar cada curso o cada año. Planifica el horario de cada semana y de cada día, intentando con fuerza cumplir el plan que te has trazado. Apunta bien los exámenes y trabajos. Lleva un diario en que apuntes todas las incidencia que sean importantes en el cumplimiento de lo que planificas. Procura que tu familia, amigos y compañeros te ayuden a respetar el Plan. Hazlo público. Propóntelo como un reto personal.


  • Felicítate por el trabajo bien hecho. Intenta pensar en positivo e ir construyendo nuevos hábitos sobre los logros que vayas alcanzando.

  • Desarrollar constancia y capacidad de esfuerzo. Son como un músculo que la práctica y ejercicio continuado los fortalece. Empieza por poco porque al principio te costará mucho trabajo concentrarte. Cada día añade un poco de tiempo más, hasta alcanzar el tiempo que necesitas para preparar bien tus asignaturas. Al final, lo harás como si nada... "sin esfuerzo".

  • Como última medida puedes contar con profesionales de la educación que te ayuden en el desarrollo de técnicas y apoyo en el estudio, siempre en caso de necesitarlo.

  • Para finalizar, ¿Quieres saber si eres un buen estudiante?
                               Cuestionario:
                               http://test-estudiantes.euroresidentes.es/como-estudiar.html

Por: Aránzazu Ibáñez

Fuente de información:
Blog de Euroresidentes.com
Cómo estudiar. Ideas para mejorar las técnicas y hábitos de estudio.

http://como-estudiar.estudiantes.info/



Pasos para aprender



Vídeo elaborado por estudiantes de Bachillerato

Pasos necesarios a la hora de estudiar mediante el uso de técnicas de aprendizaje visual para un aprendizaje significativo y una memorización comprensiva. 





Curso de Técnicas de Estudio y Nuevas Tecnologías Aplicadas al Aprendizaje, 
Aula 2 (Pamplona)







domingo, 17 de noviembre de 2013

¿Quién es Jack?



Jack Andraka es un chico de grandes ideas.

Con 16 años ha ideado un sistema de detección precoz, rápido y de bajo coste para cánceres de páncreas, ovario y pulmón. 

Puedes escucharlo en la siguiente conferencia TEDx y visitar su página web en jackandraka.net




Aquí tienes más información sobre él:











domingo, 3 de noviembre de 2013

Necesidades que se deben atender en la adolescencia.





Del acrónimo de F. Cruz:

N utrición.
E stimulación. Estima
C omunicación. Confianza. Confidencialidad. Compresión. Cariño
E ducación. Equidad de género
S alud. Ser escuchados
I nformación. Igualdad social. Inversión
D esarrollo de habilidades.
A utoconocimiento. Autoestima. Autocuidado. Asertividad. Amor Amistad
D ialogar. Divertirse. Disfrutar
E stabilidad emocional. Empatía
S ocialización. Seguridad. Servicios

Fuente de información: 
ADOLESCERE. Revista de Formación Continuada de la Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia . Volumen I. Nº 2. 10 Mayo 2013